En la gala de los Óscar no sólo se repartieron estatuillas.
La repentina situación entre el actor Will Smith y el humorista Christian Rock en la madrugada del lunes 28 de marzo de 2022, incomodó tanto a los presentes de la 94o gala de los Óscar como a los que lo vieron desde sus casas. Sucedió que este comediante fue abofeteado por el célebre actor, luego de hacer un chiste aludiendo a la alopecia de la mujer de éste.

No era de esperar esa tan brutal respuesta, y en mi opinión me parece que no fue una buena forma de actuar frente al público. Para mí la violencia está definida como “la última carta de la baraja” y no lo vi necesario, mucho menos en este tan famoso personaje, pues todos sabemos que Will Smith también empleó muchos de sus años en el género del humor y no debió actuar de ese modo, aunque viese a su mujer sufriendo a causa de la broma. Por otra parte, el comediante Chris estuvo muy fuera de lugar, y creo que debería saber que al actor no le gusta que hablen mal de su pareja. Su esposa no se merecía esa broma pesada, porque seguro que lo tuvo que pasar muy mal al quedar sin pelo, pero aún así no hay excusa para que W. Smith diese aquel gran sopapo.

En mi opinión, creo que bastaba con que al acabar el programa, o en un momento a solas se le acercara, le llamase la atención y lo hablasen de una forma más pacífica y adecuada. Y aquí quiero apuntillar que me parece que la disculpa que realizó al final de la gala fue lo mejor para rebajar la posterior polémica.

En fin, pensemos lo que pensemos, la violencia nunca puede estar justificada.